Son tatuajes biotecnológicos y con cierto relieve que cuentan con componentes electrónicos, entre ellos, un microcontrolador y luces LED para poder controlar la salud o los datos de ubicación de la persona.
La startup estadounidense Chaotic Moon trabaja en el desarrollo de tatuajes temporales capaces de monitorizar la actividad física y la ubicación, al igual que los actuales ‘wearables’. Se llaman ‘Tech Tats’ y se pegan, literalmente, en la piel del usuario.
Estos tatuajes detectan si la persona que lo lleva está estresada, pueden controlar su temperatura corporal, medir su presión arterial, su frecuencia cardíaca, su nivel de hidratación y comunicar todos estos datos a través de la pintura electroconductora que utiliza y del microsensor que va adherido al cuerpo.
En caso de que detecte cambios importantes en las constantes vitales del sujeto, cambia de color, funcionando así una señal de alerta de que algo no va bien. Esta información podría ser utilizada con fines médicos.
De momento, se trata de un prototipo en el que Chaotic Moon sigue trabajando, con la ayuda de investigadores de San Diego (Estados Unidos), científicos coreanos e incluso un equipo de Motorola.