Si bien el pintado inicial de los coches casi siempre es efectuado por robots, el acabado de vehículos se suele llevar a cabo manualmente, por lo que la mejora de la seguridad laboral en esta área es de especial importancia. BESA Bernardo Ecenarro S.A., especialistas en la fabricación de pinturas y recubrimientos especiales del norte de España, cuenta con un nuevo sistema de revestimiento de poliuretano que tiene como base los endurecedores de la línea Desmodur® ultra de Covestro, que es todo un ejemplo en este ámbito. “Gracias al uso de estos endurecedores, ahora podemos ofrecer soluciones eficaces para mejorar la higiene laboral, lo que redunda en beneficio de nuestros clientes y del medio ambiente”, explica Lorenzo Cerrada, director técnico de BESA.
Los reticulantes de la línea ultra tan solo contienen diisocianatos monoméricos en una cantidad residual, inferior al 0,1%. La alta calidad de estos endurecedores está al mismo nivel que en el caso de los reticulantes convencionales. La manipulación de revestimientos de poliuretano es inocua para la salud, pero se considera que los diisocianatos monoméricos pueden ser perjudiciales para las vías respiratorias y la piel si no se toman las medidas de protección apropiadas.
“Estamos satisfechos de poder dar respuesta a la creciente demanda de mayor seguridad laboral en el área del acabado de vehículos. La cooperación con Covestro nos da la oportunidad de posicionarnos como pioneros en este mercado”, afirma Amaia Mujika, directora de marketing de BESA. Gracias a los endurecedores de la línea ultra de Covestro para revestimientos en el acabado de automóviles, esta empresa española está preparada para cumplir la normativa REACH, que regula el uso limitado de los diisocianatos y cuya aprobación por la Comisión Europea está prevista para este año.