La Universitat Jaume I de Castellón ha galardonado con los premios «Personal investigador joven», convocados dentro del Plan propio de Investigación para 2023, a Lubertus Bijlsma (Ciencias); Esther Castillo Gómez (Ciencias de la Salud); Manuel Francisco Dolz Zaragozá (Ingeniería y Arquitectura); María Lidón Moliner Miravet (Ciencias Sociales y Jurídicas) y Agnese Sampietro (Artes y Humanidades), con una dotación económica para cada uno de los investigadores e investigadoras de 1.500 euros.
Incorporar personal investigador con talento que contribuya al desarrollo social, cultural y económico de su entorno es una de las vías para mantener la calidad investigadora de la Universitat Jaume I. Los premios quieren reconocer la calidad y la excelencia en el desempeño de la tarea investigadora tanto del personal que está en la fase inicial de su carrera como del personal científico junior, desde la etapa de perfeccionamiento postdoctoral hasta la etapa de consolidación.
El objetivo de la investigación de Lubertus Bijlsma, del grupo Q-AMS – Química Analítica en Salud Pública y Medio Ambiente, ha sido la suma de conocimientos sobre los contaminantes emergentes y su eficaz eliminación en los procesos de tratamiento de aguas. Actualmente, se orienta hacia la epidemiología basada en aguas residuales (EBA), un enfoque de vanguardia que usa las aguas residuales como fuente de información y evaluación de la salud comunitaria.
La investigación de Esther Castillo Gómez, coordinadora del grupo de investigación NEST – Neuropatologia y plasticidad cerebral se ha centrado en comprender el papel de la plasticidad cerebral en la salud mental, en concreto, en los trastornos socioafectivos relacionados con el estrés en etapas vulnerables de la vida, como la infancia, la adolescencia o la senescencia. Estudian las consecuencias del estrés con varios enfoques biotecnológicos y un análisis avanzado de imágenes y muestras cerebrales.
Las contribuciones de Manuel F. Dolz Zaragozá, del grupo HPC&A – Arquitecturas y Computación de Altas Prestaciones, se encuentran en las áreas de Computación de Alto Rendimiento (HPC) y Ciencia Computacional, con el objetivo de optimizar aplicaciones de ciencia e ingeniería, así como de contribuir en la lucha del cambio climático y generar avances en varios sectores como, por ejemplo, el desarrollo y mejora de aplicaciones de inteligencia artificial para la atención sanitaria, las cuales pueden conducir a diagnósticos más precisos, mejor asistencia y tratamientos personalizados.
Lidón Moliner Miravet, coordinadora del grupo EDARSO – Educación, Arte y Sociedad, ha situado su trabajo desde una perspectiva inclusiva, con el objetivo de crear sociedades más justas y comprometidas a través de la aplicación de la tutoría entre iguales recíproca en áreas como las matemáticas, las historias de vida de profesorado LGTBIQ+ como recurso pedagógico o del aprendizaje cooperativo desde la música comunitaria. En todos los casos se trata de promover la formación de una ciudadanía más activa, crítica e inclusiva.
La tarea investigadora de Agnese Sampietro, del grupo Sociolingüística, ha sido el estudio lingüístico de la multi modalidad en Internet, es decir, la integración de texto, imágenes y otros recursos semióticos en la comunicación digital. Su tesis doctoral fue el primer trabajo sobre los emojis que abrió una línea de investigación original que ahora continúa personal investigador de todo el mundo.