A solicitud de Ignacio Aguado y Eduardo Sicilia, vicepresidente de la Comunidad de Madrid y consejero de Universidades, Ciencia e Innovación, respectivamente, se ha celebrado una reunión telemática con Ricardo Díaz, Decano del Colegio de Químicos de Madrid.
El objetivo de la consulta ha sido revisar posibles actuaciones que permitan realizar la vuelta al trabajo de la forma más segura tras el periodo de confinamiento..
Se ha hablado de medidas de prevención de contagios, distanciamiento, equipos de protección e higiene, así como de los medios necesarios para la identificación de nuevos positivos por Covid19 (test rápidos y PCR).
El Decano ha informado a los miembros del ejecutivo madrileño que la salida de la crisis sólo es posible compatibilizando la salud con la vuelta a la actividad económica. Para lograrlo, además de las medidas de protección, son necesarias medidas prospectivas en la identificación de infecciosos, sintomáticos y asintomáticos, aplicando pruebas diagnósticas masivas en coordinación con los servicios de Prevención de Riesgos Laborales y de Vigilancia de la Salud de las empresas.
En este sentido, es necesario poner a funcionar todos los medios de diagnóstico disponibles en la Comunidad de Madrid, sin escatimar recursos ni esfuerzos y recurriendo a la colaboración público-privada, al objeto de disponer de una potente red de identificación de positivos y ponerla a disposición de los servicios de Prevención de Riesgos Laborales de las empresas.
El factor temporal ha sido trascendental en la propagación de la pandemia. De la misma manera, los plazos de aplicación de medidas también juegan un papel importante en la destrucción del tejido productivo madrileño. Por ello es imprescindible, con la máxima seguridad, retomar cuanto antes la actividad económica de nuestra Comunidad.
Es una obviedad que el coste de las pruebas diagnósticas periódicas de las plantillas de empleados es perfectamente asumible frente al coste económico y social que conlleva tener paradas nuestras empresas. Ni se puede, ni se debe, elegir entre salud y economía porque no hay economía si no se garantiza la salud ni tampoco existe salud sin crear los recursos económicos que la hagan posible.