La seguridad para Cepsa es eje fundamental a la hora de desarrollar las operaciones en sus centros industriales y por eso cada año se invierten en proyectos de mejora en este campo de cara a implementar las últimas novedades en el sector. La seguridad de las personas que trabajan en Palos, las instalaciones y su entorno, es una prioridad para la Compañía y por eso a lo largo de 2019 se han invertido más de 12 millones en iniciativas para mantener la seguridad del centro industrial en el primer nivel.
De otro lado, se llevaron a cabo a lo largo del año pasado un total de 87 simulacros de emergencia para practicar y comprobar la eficacia, así como parte de la mejora
continua del plan de emergencia. No solo la formación práctica en simulacros es una constante en Cepsa, sino que además en 2019 se han impartido más de 20.000 horas de formación en materia de seguridad dirigidas a empleados de la Compañía a las que hay que sumar las impartidas al personal de las empresas auxiliares que trabajan en las instalaciones.
También el año pasado se reforzó el programa de `caminatas’ por las instalaciones, tanto en la Refinería La Rábida como en la planta química de Palos, con el objetivo de
incrementar la seguridad, el orden y la limpieza en las plantas, y se dieron los primeros pasos en la implantación del modelo PSM (Process Safety Management), basado en el del Energy Institute; igualmente se trabajó con la metodología Hazop, una herramienta avanzada para el análisis de seguridad de la operación de las unidades, extendida en el sector químico. Con estas herramientas Cepsa ha optado por ir más allá de la reglamentación, adoptando las mejores prácticas existentes en el sector.
La prevención es un elemento inseparable de la Seguridad, uno de los valores de la Compañía, por ello aplica exigentes medidas en sus instalaciones y las somete cada
año a auditorías, tanto interna como externas; una vez más, el complejo industrial de Palos ha superado las exigencias de los auditores, renovando la certificación
internacional OHSA 18001 sobre sistemas de prevención de riesgos, mas allá de los requisitos legalmente exigibles y aprobando la inspección anual de cumplimiento del
RD 840/2015 sobre minimización de accidentes graves, entre otros.
Además, Cepsa cuenta con procedimientos y aplicaciones informáticas propias de investigación de accidentes e incidentes.
Durante el año 2019, se ha continuado utilizando el sistema informatizado de permisos de trabajo utilizando equipos móviles y que ha mejorado sustancialmente la seguridad y control en este tipo de actividades además de la optimización de los recursos. Por otro lado, también se ha consolidado la implantación del sistema de control de bloqueos LOTO que, integrado con el nuevo sistema informatizado de permisos de trabajo, supone un gran paso en materia de seguridad en las actividades de
mantenimiento (LOTO: LOCK OUT – TAG OUT, hace referencia a las prácticas y procedimientos de bloqueo y etiquetado de máquinas o equipos para proteger la
seguridad de los trabajadores ante una liberación peligrosa de energía).
Finalmente, se continúa con un nivel bajo de Índice de Frecuencia de Accidentes Laborales en la Refinería La Refinería La Rábida y la planta química de Palos. Este
índice, que mide el número de accidentes con baja médica por millón de horas trabajadas, ha sido de 0,91 y 0 respectivamente. Un logro posible gracias a la
observación preventiva, la implantación de acciones correctoras, el cumplimiento riguroso de los planes de seguridad, la evaluación de los riesgos y la concienciación de
los trabajadores, tanto de plantilla como de empresas auxiliares.
Cepsa trabaja día a día para lograr la cifra de cero accidentes, para lo cual no solo es necesario invertir y llevar a cabo simulacros sino concienciar a todos los empleados,
tanto de Cepsa como de las empresas auxiliares, de que la seguridad es lo primero que deben tener en mente, que la prevención es la mejor defensa y que no se debe bajar la guardia en ningún momento.