Pone en marcha la primera planta química en el mundo en evolucionar la tecnología para la producción de la materia prima de detergentes biodegradables
- El innovador desarrollo tecnológico permite aumentar la seguridad, optimizar el uso de materias primas, y eliminar emisiones y la generación de residuos
- Asimismo, esta tecnología permite reducir el consumo de agua hasta 80.000 m3 al año, y mejorar la calidad y versatilidad del Alquilbenceno Lineal (LAB), la materia prima de los detergentes biodegradables
- La compañía invierte 117 millones de euros para reforzar su liderazgo mundial en la fabricación de LAB, cuya producción podrá aumentar para responder a la creciente demanda motivada por la pandemia de la COVID-19
- El proyecto ha recibido el Premio Europeo de Medio Ambiente a la Empresa-Sección Española 2020, del Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) y el premio del Colegio de Ingenieros Industriales de Andalucía Occidental
Cepsa intensifica su apuesta por la innovación, la seguridad y la sostenibilidad mediante la puesta en marcha, en San Roque (Campo de Gibraltar, Cádiz), de la primera planta química en España en emplear la tecnología Detal. Se trata además de la primera fábrica de Alquilbenceno Lineal (LAB) del mundo que sustituye una tecnología basada en ácido fluorhídrico (HF) por la de Detal, un proceso más seguro, eficiente y sostenible, que permite optimizar el uso eficiente de materias primas y electricidad, y eliminar emisiones y la generación de residuos (1.100 toneladas al año). Asimismo, este avance tecnológico reduce el consumo de agua en 80.000m3 al año, y mejora la calidad y versatilidad del Alquilbenceno Lineal (LAB), la materia prima para la elaboración de detergentes biodegradables, que se produce en esta planta.
Tras cerca de dos años de trabajos, la tecnología aplicada para la transformación de la planta, cuya patente ha sido desarrollada por Cepsa en colaboración con UOP (Universal Oil Products), ha supuesto la creación de 250 puestos de trabajo en el Campo de Gibraltar, llegando incluso a alcanzar los 600 en algunas fases del proceso, con más de 800.000 horas invertidas en ingeniería y construcción y el apoyo de medio centenar de empresas auxiliares, la mayoría de la provincia. Asimismo, se han empleado 700 toneladas de acero, 3.180 m3 de hormigón, 40 km de tuberías y 60 km de cableado. Desde 2019, la Planta Química Puente Mayorga utiliza energía eléctrica 100% renovable suministrada por el área de Gas y Electricidad de Cepsa.
La inversión de 117 millones de euros en la mejora tecnológica posibilita a Cepsa a su vez aumentar la producción de la planta y responder así a la creciente demanda de detergentes biodegradables. Con este desarrollo, la compañía consolida su posición como líder global en la fabricación de LAB, mejorando su oferta especialmente para los mercados africanos, en los que se espera una mayor demanda en los próximos años.
Para Paloma Alonso, directora de Química de Cepsa, “esta inversión nos permite seguir a la vanguardia de la innovación en el ámbito de los detergentes biodegradables, un elemento fundamental para garantizar la higiene y la salud, especialmente durante la pandemia. Además, mediante esta nueva tecnología no solo somos más eficientes, sino que conseguimos maximizar la sostenibilidad de nuestros procesos, en línea con nuestra apuesta por el cuidado del medio ambiente”.
El proyecto Detal da cumplimiento a tres de los ODS que la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible plantea: el Objetivo 9, desarrollar infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible, y fomentar la innovación; el Objetivo 12, garantizar las pautas de consumo y de producción sostenibles, así como el Objetivo 13, tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
La innovación y calidad del proyecto Detal de Cepsa le ha valido la entrega por parte de SM el Rey Felipe VI del Premio Europeo de Medio Ambiente a la Empresa-Sección Española 2020, en la categoría de Proceso, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO). También obtuvo el premio del Colegio de Ingenieros Industriales de Andalucía Occidental, en la categoría Premio Andalucía al Desarrollo de la Industria y el Premio ‘ICIS Surfactants Awards’, un reconocimiento internacional a la excelencia e innovación en diferentes ámbitos del sector químico, en la categoría de innovación tecnológica.
Mejoras de seguridad y eficiencia energética
El proceso de transformación de la planta de San Roque no solo ha mejorado la calidad y la variedad del LAB, sino que también ha incrementado la seguridad de los procesos y la eficiencia energética del centro industrial. Durante la parada se han llevado a cabo tareas de mantenimiento e inspección de otras unidades del centro industrial dirigidas a incrementar la eficiencia, sostenibilidad y seguridad de las mismas, con una inversión total de 26 millones de euros, incluyendo el traslado a la nueva sala de control Ágora, siguiendo el proyecto de digitalización de Cepsa en las plantas industriales de Andalucía.
Además, se han instalado los programas de transformación digital diseñados por la compañía, como el sistema YET (Yield, Energy and Throughput), un programa de inteligencia artificial y aplicación de tecnologías propias de la industria 4.0 (machine learning, big data y advanced analytics), que permite optimizar los procesos y mejorar la eficiencia energética de la planta.
La química en Cepsa
Cepsa es el líder mundial en la producción de Alquilbenceno Lineal (LAB), el surfactante biodegradable más usado del mundo en detergentes para el lavado de ropa, y también es el fabricante número uno de cumeno, con el que se fabrica fenol y otros productos indispensables hoy en nuestra vida. Opera en 8 países y vende sus productos a clientes en todo el mundo.
Las materias primas que elabora Cepsa permiten la fabricación de múltiples productos, muchos de ellos para mejorar la higiene, como los geles hidroalcohólicos, y la protección, como gafas de seguridad y barreras transparentes. Los productos de Cepsa son esenciales para los sectores de cuidado personal y de la casa, farmacéutico, automóvil, nuevas tecnologías, construcción y muchos otros. En el 2020 la compañía funcionó a pleno rendimiento en las difíciles circunstancias generadas en el contexto de la pandemia de la COVID-19, para dar respuesta a la demanda de muchos de estos productos, esenciales para las personas.
El negocio de Química de Cepsa obtuvo un resultado récord en 2020 con un aumento del 45% respecto al año anterior.