El término “economía circular” está cobrando cada vez más importancia dentro del círculo alimenticio y nutricional como parte de la lucha contra el cambio climático y el aumento de la población mundial. Gracias a ecovio®, un material plástico, compostable y certificado, BASF ha desarrollado una cartera de materiales para diferentes usos que puede emplearse durante todo el ciclo alimenticio. Existen varios estudios de institutos de investigación independientes que confirman las ventajas de ecovio® en las etapas de producción, envasado, transporte y almacenaje de residuos alimenticios. Dichos estudios se basan en la biodegradabilidad certificada de los materiales del compost industrial,y doméstico, así como en el terreno. Además, muestran que los residuos alimenticios se reducen, que la tierra reabsorbe los nutrientes al generar mayores volúmenes de compost y también que se evita la acumulación de plásticos sobre el terreno.
Plásticos para la protección de cultivos que se biodegradan en el terreno para lograr una agricultura sostenible
En muchos países los agricultores emplean plásticos finos de polietileno (PE) para la protección de cultivos con el fin de aumentar el rendimiento de los mismos. Sin embargo, suele resultarles imposible recoger todos esos plásticos tras recolectar la cosecha, sobre todo cuando su grosor es muy fino. Por ello, los residuos de PE terminan acumulándose en el terreno, ya que no se degradan. Un estudio de ETH Zürich, de Suiza, acaba de demostrar por primera vez que los plásticos elaborados con adipato-tereftalato de polibutileno (PBAT) pueden servir de alimento para los microbios del terreno. Los microorganismos emplean el carbono del polímero tanto para generar energía como para producir biomasa. Esto implica que el PBAT se degrada de forma biológica en el terreno y que, a diferencia del PE, desaparece del mismo.
ecovio® M2351 de BASF es un plástico certificado con la EN 17033 que se biodegrada en el terreno y que puede usarse para proteger cultivos. Está fabricado con copoliéster ecoflex® biodegradable (PBAT) y otros polímeros biodegradables hechos con materias primas renovables. Los plásticos que se elaboran con ecovio® M2351 pueden dejarse en el terreno al acabar la cosecha, en vez de tener que realizar la tediosa labor de recogida y reciclaje. Los microorganismos propios del terreno, como la bacteria fungi, interpretan la estructura del plástico para la protección de cultivos ecovio® M2351 como un alimento que pueden metabolizar. La materia final restante después de que los microorganismos lo biodegraden está constituida por CO2, agua y biomasa.